Peter Schiff ha refutado la reciente afirmación del presidente Donald Trump de que un nuevo acuerdo comercial con Vietnam llevaría a que EE. UU. impusiera aranceles del 20% al 40% sobre los productos vietnamitas. Trump argumenta que esta es una medida "de respuesta" beneficiosa para EE. UU.
Sin embargo, Schiff rechazó este argumento y señaló que:
"Vietnam no nos pagará ni un centavo. Los estadounidenses tendrán que pagar al gobierno de EE. UU. entre el 20% y el 40% si compran productos fabricados en Vietnam, mientras que los vietnamitas no tienen que pagar nada si compran nuestros productos."
Según Schiff, esto demuestra que los aranceles son en realidad una carga que recae sobre los consumidores de EE. UU., y no sobre los exportadores de Vietnam. Cada vez que un estadounidense compra un producto de Vietnam después de la imposición de aranceles, está pagando más dinero al gobierno de EE. UU., lo que aumenta el costo de consumo interno.
Esta declaración tiene como objetivo aclarar el impacto real de los aranceles, al mismo tiempo que refleja el malentendido común de que los aranceles de importación son un castigo para el país exportador. Schiff enfatiza que este tipo de políticas no solo son ineficaces, sino que también pueden perjudicar a la propia economía de EE. UU.
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Peter Schiff responde a Trump: Impuesto del 20%–40% sobre productos de Vietnam es una carga para los estadounidenses.
Peter Schiff ha refutado la reciente afirmación del presidente Donald Trump de que un nuevo acuerdo comercial con Vietnam llevaría a que EE. UU. impusiera aranceles del 20% al 40% sobre los productos vietnamitas. Trump argumenta que esta es una medida "de respuesta" beneficiosa para EE. UU.
Sin embargo, Schiff rechazó este argumento y señaló que:
Según Schiff, esto demuestra que los aranceles son en realidad una carga que recae sobre los consumidores de EE. UU., y no sobre los exportadores de Vietnam. Cada vez que un estadounidense compra un producto de Vietnam después de la imposición de aranceles, está pagando más dinero al gobierno de EE. UU., lo que aumenta el costo de consumo interno.
Esta declaración tiene como objetivo aclarar el impacto real de los aranceles, al mismo tiempo que refleja el malentendido común de que los aranceles de importación son un castigo para el país exportador. Schiff enfatiza que este tipo de políticas no solo son ineficaces, sino que también pueden perjudicar a la propia economía de EE. UU.