El poder adquisitivo del Tesoro de Ethereum (DAT) ha caído drásticamente recientemente.
Los datos de noviembre muestran que estas tesorerías solo compraron 370,000 ETH; en comparación con la loca compra de 1,970,000 en agosto, esto representa una caída del 81%. Originalmente, todos esperaban que el modelo de tesorería pudiera sostener el relevo de la "temporada de altcoins" en este ciclo, pero ahora parece que esta ola de entusiasmo está rápidamente enfriándose.
Lo que es aún más grave es que el mNAV (valor neto de activos del mercado) sigue bajo presión, lo que reduce aún más la disposición a comprar. Aquellos fondos más pequeños están en una situación peor, con canales de financiamiento interrumpidos, cayendo en una típica espiral de muerte: no se pueden vender → la valoración cae → nadie invierte → sigue sin poder vender.
La velocidad a la que retrocede la narrativa del tesoro es mucho más rápida de lo que muchos esperaban.
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
El poder adquisitivo del Tesoro de Ethereum (DAT) ha caído drásticamente recientemente.
Los datos de noviembre muestran que estas tesorerías solo compraron 370,000 ETH; en comparación con la loca compra de 1,970,000 en agosto, esto representa una caída del 81%. Originalmente, todos esperaban que el modelo de tesorería pudiera sostener el relevo de la "temporada de altcoins" en este ciclo, pero ahora parece que esta ola de entusiasmo está rápidamente enfriándose.
Lo que es aún más grave es que el mNAV (valor neto de activos del mercado) sigue bajo presión, lo que reduce aún más la disposición a comprar. Aquellos fondos más pequeños están en una situación peor, con canales de financiamiento interrumpidos, cayendo en una típica espiral de muerte: no se pueden vender → la valoración cae → nadie invierte → sigue sin poder vender.
La velocidad a la que retrocede la narrativa del tesoro es mucho más rápida de lo que muchos esperaban.