La estancación de esta ronda del mercado no es porque no haya historias que contar, sino porque todos están buscando el próximo concepto lo suficientemente atractivo.

AI Meme realmente se ha vuelto aburrido, la fatiga estética es una realidad. Pero eso no significa que el juego haya terminado. La verdadera cuestión radica en que—demasiados proyectos optan por la forma más perezosa: poner un concepto de IA, modificar un poco el código, copiar las formas de jugar anteriores y luego esperar cosechar beneficios. No hablemos de innovación, esto es simplemente copiar y pegar sin cerebro.

Las inscripciones y runas de BTC, en esencia, son portadores de narrativas tecnológicas. Solo que toda narrativa tecnológica tiene su propio ciclo de vida: crecimiento salvaje, burbuja estallada, sedimentación de valor, y luego iteración. Ahora mismo estamos atascados en la fase de sedimentación, lo cual es un proceso completamente normal.

Mirando hacia adelante, las verdaderas oportunidades de crecimiento probablemente surgirán en dos áreas: una son esas aplicaciones de IA que realmente resuelven problemas y tienen escenarios prácticos; la otra son marcos tecnológicos completamente disruptivos. Pero todo esto requiere que alguien esté dispuesto a invertir esfuerzo en una innovación genuina, y no seguir en este juego interminable de conceptos anidados.

La liquidez del mercado nunca ha sido escasa, lo que realmente es escaso son los proyectos en los que vale la pena apostar. En otras palabras, el dinero está en modo de espera.