¿Cuál es el objetivo final de los negocios? La respuesta tradicional siempre ha sido: ganar dinero.

Pero en esta nueva tierra llamada Web3, hay una comunidad que está haciendo algo que parece "irrazonable": abandonar la maximización de beneficios simple y buscar en cambio la maximización del impacto social.

Esto suena como un sueño idealista. Pero pensándolo bien, utilizan las herramientas de la economía de tokens no para hacer una venta rápida y loca, sino para crear sistemáticamente valor educativo y externalidades positivas. Esta estrategia que parece contraria a la intuición empresarial, en realidad acumula cosas invisibles — lealtad de los usuarios, consenso comunitario, confianza a largo plazo. Y esas cosas, en definitiva, son los activos más difíciles de copiar y los más valiosos desde el punto de vista comercial.

Las formas de obtener beneficios son variadas. A veces, mantener un valor que parece "irrazional" puede desbloquear un potencial comercial más profundo. Quizá esa sea la diferencia fundamental entre Web3 y los negocios tradicionales.