El mercado predictivo está comiendo la tarta que dejaron las Meme coins. Esto no es solo una conjetura — es una migración de capital que ya está en marcha.

En el momento en que Polymarket recibió una inversión de 2 mil millones de dólares de la matriz de la Bolsa de Nueva York y obtuvo la licencia completa en EE. UU., la dirección del mercado ya estaba bastante clara. La era en la que la gente perseguía frenéticamente las monedas meme, como gatos y perros, está llegando a su fin, siendo reemplazada por una nueva pista mucho más dura y también más tentadora: apostar por la "verdad".

¿Pero por qué sucede esto?

Las Meme coins no murieron de repente. Murieron por una contradicción fundamental: los tokens pueden ser ilimitados, pero la atención de las personas siempre es escasa. Cuando Pump.fun redujo el costo de emitir tokens a casi cero, la oferta de tokens en el mercado comenzó a crecer exponencialmente. Al mismo tiempo, los fondos, el tiempo y el entusiasmo de los minoristas solo podían crecer de manera lineal. El resultado es bastante claro: los ciclos de tendencia se acortan cada vez más, pero las caídas prolongadas en el largo plazo son cada vez más frecuentes.

Muchos empiezan a sentirse agotados. Los nuevos proyectos siguen surgiendo, pero ya nadie quiere hacer clic para verlos; las narrativas y conceptos aparecen uno tras otro, pero en el fondo solo hay una voz: al final, todo colapsará.

Los proyectos de mercado predictivo en la cadena BNB están convirtiéndose en la nueva estrella para el capital. En este nuevo ecosistema de especulación, la gente ya no apuesta por subir o bajar el precio de las monedas, sino por la "verdad" — apostar quién ganará las elecciones, la dirección de las políticas de criptomonedas, o el próximo movimiento del mercado. Este tipo de juego puede parecer menos emocionante, pero la lógica que lo respalda es mucho más implacable.