Según la investigación de MyPerfectResume para 2025, un llamativo 71% de los trabajadores estadounidenses ahora dependen de fuentes de ingresos secundarias solo para cubrir los gastos básicos de vida. ¿El culpable? El estancamiento del crecimiento salarial que no logra igualar las tasas de inflación, combinado con el debilitamiento de las condiciones del mercado laboral en los últimos meses. Esta tendencia ha alimentado lo que muchos llaman el fenómeno de la “cultura del hustle”—donde los empleados realizan trabajos adicionales mientras los empleadores esperan más productividad por el mismo salario.
La paradoja del rendimiento
Aquí está la verdad incómoda: gestionar múltiples fuentes de ingreso no escala. Jasmine Escalera, estratega de carrera en MyPerfectResume, revela que casi la mitad de los trabajadores encuestados (49%) reconocen abiertamente que su trabajo secundario sabotea su concentración y rendimiento en su empleo principal. Estar demasiado estirado inevitablemente conduce a un bajo rendimiento, lo que puede desencadenar consecuencias que van desde estancamiento en los aumentos hasta la terminación del empleo.
El avance profesional se queda atascado
Lo que parece ser productividad en realidad crea un ciclo vicioso. Cuando los empleadores perciben una menor dedicación, los ascensos se ralentizan y los salarios base se congelan. Tu trabajo adicional sufre el mismo destino—las ganancias se estancan porque no tienes capacidad para hacer crecer ese ingreso. Como explica Avery Morgan, directora de recursos humanos de EduBirdie, los trabajadores terminan trabajando más sin avanzar, atrapados en un limbo profesional.
La crisis de salud de la que nadie habla
El impacto físico es real y medible. Más del 21% de los encuestados en el estudio de MyPerfectResume reportaron una disminución notable en su salud física tras comenzar un trabajo secundario. Cuando la privación del sueño, los entrenamientos saltados y la comida rápida reemplazan el descanso y el cuidado personal, tu cuerpo inevitablemente paga el precio.
Estrés, agotamiento y deterioro mental
Operar dos trabajos simultáneamente crea una tormenta perfecta para el deterioro de la salud mental. Sam DeMase de ZipRecruiter señala que añadir un trabajo secundario a un empleo a tiempo completo amplifica el estrés, la frustración, la pérdida de motivación y el agotamiento severo. Esta tensión psicológica no existe en aislamiento—se propaga a relaciones debilitadas y a una satisfacción general de vida disminuida.
Las relaciones se convierten en daño colateral
El tiempo es finito, y las relaciones requieren inversión. Cuando el trabajo consume tu calendario, la familia y las amistades pasan a segundo plano. Aunque los padres puedan creer que los sacrificios a corto plazo no importarán, la realidad suele golpear fuerte meses o años después, cuando sus hijos han crecido emocionalmente o los matrimonios se han deteriorado silenciosamente. El daño, una vez hecho, tarda años en repararse—si es que puede repararse en absoluto.
La verdadera pregunta
Los trabajos adicionales pueden ofrecer un alivio financiero genuino y satisfacción creativa. Sin embargo, siempre exigen un precio—a veces medido en salud, impulso profesional o en las personas más cercanas a ti. Antes de lanzarte al estilo de vida del hustle, evalúa si los ingresos extra realmente justifican los costos ocultos que se multiplican en segundo plano.
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La trampa del trabajo múltiple: por qué 7 de cada 10 trabajadores están agotados
Según la investigación de MyPerfectResume para 2025, un llamativo 71% de los trabajadores estadounidenses ahora dependen de fuentes de ingresos secundarias solo para cubrir los gastos básicos de vida. ¿El culpable? El estancamiento del crecimiento salarial que no logra igualar las tasas de inflación, combinado con el debilitamiento de las condiciones del mercado laboral en los últimos meses. Esta tendencia ha alimentado lo que muchos llaman el fenómeno de la “cultura del hustle”—donde los empleados realizan trabajos adicionales mientras los empleadores esperan más productividad por el mismo salario.
La paradoja del rendimiento
Aquí está la verdad incómoda: gestionar múltiples fuentes de ingreso no escala. Jasmine Escalera, estratega de carrera en MyPerfectResume, revela que casi la mitad de los trabajadores encuestados (49%) reconocen abiertamente que su trabajo secundario sabotea su concentración y rendimiento en su empleo principal. Estar demasiado estirado inevitablemente conduce a un bajo rendimiento, lo que puede desencadenar consecuencias que van desde estancamiento en los aumentos hasta la terminación del empleo.
El avance profesional se queda atascado
Lo que parece ser productividad en realidad crea un ciclo vicioso. Cuando los empleadores perciben una menor dedicación, los ascensos se ralentizan y los salarios base se congelan. Tu trabajo adicional sufre el mismo destino—las ganancias se estancan porque no tienes capacidad para hacer crecer ese ingreso. Como explica Avery Morgan, directora de recursos humanos de EduBirdie, los trabajadores terminan trabajando más sin avanzar, atrapados en un limbo profesional.
La crisis de salud de la que nadie habla
El impacto físico es real y medible. Más del 21% de los encuestados en el estudio de MyPerfectResume reportaron una disminución notable en su salud física tras comenzar un trabajo secundario. Cuando la privación del sueño, los entrenamientos saltados y la comida rápida reemplazan el descanso y el cuidado personal, tu cuerpo inevitablemente paga el precio.
Estrés, agotamiento y deterioro mental
Operar dos trabajos simultáneamente crea una tormenta perfecta para el deterioro de la salud mental. Sam DeMase de ZipRecruiter señala que añadir un trabajo secundario a un empleo a tiempo completo amplifica el estrés, la frustración, la pérdida de motivación y el agotamiento severo. Esta tensión psicológica no existe en aislamiento—se propaga a relaciones debilitadas y a una satisfacción general de vida disminuida.
Las relaciones se convierten en daño colateral
El tiempo es finito, y las relaciones requieren inversión. Cuando el trabajo consume tu calendario, la familia y las amistades pasan a segundo plano. Aunque los padres puedan creer que los sacrificios a corto plazo no importarán, la realidad suele golpear fuerte meses o años después, cuando sus hijos han crecido emocionalmente o los matrimonios se han deteriorado silenciosamente. El daño, una vez hecho, tarda años en repararse—si es que puede repararse en absoluto.
La verdadera pregunta
Los trabajos adicionales pueden ofrecer un alivio financiero genuino y satisfacción creativa. Sin embargo, siempre exigen un precio—a veces medido en salud, impulso profesional o en las personas más cercanas a ti. Antes de lanzarte al estilo de vida del hustle, evalúa si los ingresos extra realmente justifican los costos ocultos que se multiplican en segundo plano.