Acabamos de anunciar una noticia importante: en 2026, la bifurcación de Glamsterdam se lanzará oficialmente. ¿Qué significa esto para la competitividad de Ethereum? En pocas palabras: el límite de Gas pasará de 60 millones a 200 millones directamente.

¿Suena solo a un cambio numérico? En realidad, es mucho más que eso.

Desde otra perspectiva, significa que la arquitectura de procesamiento paralelo real está en marcha. El procesamiento de transacciones ya no será un mecanismo de cola, sino que se asemeja a ampliar de un solo carril a diez carriles en un instante. La cantidad de transacciones que se pueden procesar por segundo (TPS) tendrá un salto cualitativo, y la experiencia del usuario podrá acercarse a la fluidez de los productos de internet.

¿Y qué representa un aumento de más de 3 veces en el límite de Gas? Que un solo bloque podrá contener transacciones más complejas, contratos inteligentes más grandes, y el espacio para imaginar aplicaciones en la cadena se abrirá. Los escenarios de aplicación que antes estaban limitados ahora tienen la posibilidad de realizarse.

Lo crucial es este momento — 2026. Esto da al mercado una ventana de expectativa clara. Durante el próximo año y más, los proyectos del ecosistema basarán su planificación técnica y reservas de desarrollo en esta certeza, lo cual en sí mismo será una aceleración.

Lo más interesante es que esta actualización llega en el momento perfecto.

¿Qué ha pasado recientemente? El gobierno de Dubái ha comenzado a aceptar pagos en ETH, PayPal se ha integrado en la red de Ethereum, las stablecoins en Europa están considerando emitir en Ethereum, e incluso Arizona en EE. UU. ha propuesto eximir de impuestos a ETH. Todo esto son necesidades reales y concretas de aplicación, que en el fondo están llamando a una infraestructura subyacente más potente: una cadena pública capaz de soportar tráfico a nivel global.

La actualización de Glamsterdam es esa respuesta. Cuando se rompen los cuellos de botella en la capacidad de la red y se eliminan las barreras técnicas, la lógica de captura de valor será reescrita.

En el pasado, el mercado valoraba la «posibilidad». ¿Y en el futuro? Se valorará la «capacidad real de carga».

Muchos todavía persiguen la próxima narrativa, pero la historia más fundamental en realidad es muy simple: las cadenas públicas de base están devorando el mundo entero, y esta actualización de 2026 será su momento de mostrar sus colmillos.