La apuesta de un legendario inversor tecnológico por la innovación adquiere un nuevo significado. Diagnosticado con ELA, está respaldando las mismas tecnologías diseñadas para mejorar su propia calidad de vida. Es un poderoso recordatorio de que la creencia en el progreso no es abstracta, es profundamente personal. Cuando los fundadores e inversores cumplen con lo que dicen, apostando su propio futuro por las soluciones que defienden, esa convicción moldea ecosistemas enteros. Su viaje subraya por qué el espacio de las criptomonedas y blockchain atrae a visionarios dispuestos a stakearlo todo por la infraestructura del mañana.