SOL se encuentra ahora en un momento delicado: el precio está oscilando cerca de medias móviles clave, mientras que más del 63% de las posiciones del mercado son bajistas. Este escenario es bastante interesante: el porcentaje de cortos es alto, pero está repartido entre diferentes plataformas; en cuanto el precio se mueva, la reacción en cadena podría ser más fuerte de lo que parece.

Algunos datos lo dejan más claro:

El 63,9% de las posiciones son cortas y, además, no están concentradas—esto significa que en un movimiento alcista la resistencia podría no ser tan grande. Si los cortos en diferentes sitios empiezan a saltar stops o a liquidarse, la fuerza compradora vendrá de todos los lados.

El periodo de consolidación se está alargando y las medias móviles empiezan a juntarse—esto normalmente no es señal de agotamiento, sino más bien de acumulación de fuerza. El mercado necesita tiempo para digerir las discrepancias hasta que se decida la dirección.

Los datos de liquidación de cortos están ahí: la proporción de liquidaciones es de 4,6 a 1—esto indica que los costes y riesgos de estar en corto están acumulándose, y la fuerza potencial de los largos nunca ha desaparecido.

Desde una perspectiva estratégica, algunos consejos prácticos:

No esperes señales mucho más claras. En zonas como esta, muchas veces cuando por fin ves clara la dirección, el precio ya se ha escapado.

Si quieres posicionarte, la zona de los 134 dólares es interesante para empezar a construir posición de forma escalonada, mejor que entrar de golpe.

No seas demasiado ambicioso con los objetivos: 137,3 es la primera resistencia, si se supera con solidez, mira a 145; si el movimiento realmente despega, 155 tampoco es descartable.

Pero tienes que marcar bien la línea defensiva: los 130 dólares son un soporte clave; si se pierde, la idea era errónea y hay que salir, sin encabezonarse.

Y para cerrar, un consejo honesto: utiliza solo dinero que puedas permitirte perder, que no afecte a tu vida si lo pierdes; si ganas, habrás aprovechado la oportunidad. El mercado pasa la mayor parte del tiempo mareando, y los movimientos explosivos suelen ocurrir de repente. Cuando todos los datos apuntan a “acumulando fuerzas”, ¿prefieres estar ya dentro o esperar a que la vela verde aparezca para perseguir el precio?