Recientemente tuve una conversación bastante interesante con un alto directivo de una de las principales plataformas de intercambio; parecía una charla informal, pero al analizarla con detenimiento, descubrí que había mucha miga.

Llevo casi ocho años en este sector, y he vivido de primera mano cómo las mayores plataformas del mundo han pasado de un crecimiento salvaje a una etapa de regulación y cumplimiento normativo. Se nota claramente: esta industria está pasando de ser “lo que diga el líder” a ser “lo que dictan las reglas”. Por muy carismático que sea alguien, al final tiene que someterse a un marco institucional; es el camino inevitable de cualquier mercado maduro.

Y aquí surge la pregunta: ¿esas grandes plataformas realmente siguen también este patrón?

Si dividiéramos la evolución de un exchange en diez etapas, del 0 al 10, ¿en cuál estamos ahora? Cuando la narrativa del héroe va quedando atrás y toma el relevo el sistema de normas, ¿con qué se define la siguiente fase?

La respuesta de la directiva no fue para nada la que yo esperaba.

Me dijo que sí, que el cambio de liderazgo carismático a sostenimiento por normas es real, pero que ahora **solo hemos llegado al segundo escalón**. Eso me sorprendió de verdad.

En sus palabras había dos capas de entendimiento:

**Primera capa**: el sector está lejos de su final. La verdadera integración entre finanzas tradicionales y cripto, la construcción de un sistema de mercados de capitales on-chain, el salto sistémico en transparencia y cumplimiento... Todo esto, que puede reconfigurar el sistema financiero global, acaba de empezar. Lo que hoy es el número uno mundial, dentro de diez años podría ser solo un punto de partida. Así que la forma y las reglas de las plataformas seguirán evolucionando.

**Segunda capa**: solo cuando una organización global pueda mantener el crecimiento y la innovación sin depender de ninguna figura estelar, podrá considerarse que tiene una competitividad realmente avanzada. Y en esa dimensión, quizá solo estemos en el segundo escalón.

Para terminar, le hice una pregunta medio en broma:

Si solo estamos en el segundo escalón y quedan ocho por subir, ¿significa eso que el token de la plataforma aún puede multiplicarse por ocho?

Esa no la quiso contestar. ¿Vosotros qué pensáis?