La Capa 3 se ha convertido en la capa de ejecución que DeFi merece

Fuente: CryptoNewsNet Título original: Layer 3 se ha convertido en la capa de ejecución que DeFi merece Enlace original: https://cryptonews.net/news/defi/32106807/ ¿Cuándo fue la última vez que enviaste fondos a una Layer 3? Es muy probable que la respuesta sea “Nunca” o “No lo recuerdo”. No porque las redes Layer 3 no se utilicen —de hecho, es todo lo contrario—, sino porque no necesitas ir allí para utilizarlas. Del mismo modo que no necesitas viajar al Himalaya para probar sal del Himalaya, no hay necesidad de hacer un puente hacia L3 para aprovechar los casos de uso que soporta.

En su lugar, las redes Layer 3 llevan las ventajas directamente a tu puerta —o, para ser más precisos, directamente a tu DEX, ya sea en L1 o L2—. Esta adopción de L3, que ha transformado DeFi, ha sido una revolución silenciosa que no ha salido en la televisión. Pero no te equivoques, entre bastidores, la transformación que ha provocado ha sido bastante radical.

Hoy, las finanzas descentralizadas son mejores en todos los aspectos relevantes —velocidad, liquidez, datos, pares de trading— gracias al trabajo silencioso que las L3 están realizando tras bambalinas. Pero, ¿en qué consiste exactamente ese trabajo y cómo ha elevado el panorama onchain hasta un entorno que puede igualar todo lo que ofrecen las plataformas centralizadas —y, a menudo, superarlas en su propio terreno?

Cómo el Ala Oeste de DeFi salió del frío

Los primeros intentos de crear redes Layer 3 se limitaron en gran medida a appchains: una aplicación, una red dedicada y sin otro tráfico que pudiera saturarla. Aunque ese sigue siendo un caso de uso válido para la tecnología L3, como han demostrado los derivados Layer-3 de Optimism y Arbitrum, esta capa superior se utiliza cada vez más para la conectividad —infraestructura, para ser precisos—. Este cambio ha hecho que L3 pase del aislamiento a convertirse en un pilar del trading y la generación de rendimientos en DeFi.

¿Recuerdas el Ala Oeste del castillo en La Bella y la Bestia de Disney? Era una zona prohibida a la que nadie entraba, salvo la propia Bestia. Así era Layer 3 cuando se lanzaron las primeras appchains, la mayoría de las cuales pronto se convirtieron en cadenas fantasma con pocos usuarios. Pero eso ya es historia: el Ala Oeste ahora está abierta al público y no necesitas subir escaleras chirriantes para llegar, porque sus beneficios se canalizan directamente a las dapps que ya utilizas en L1.

Si Layer 1 es la capa de liquidación (la “verdad”) y Layer 2 la capa de escalado (la velocidad), Layer 3 ha evolucionado silenciosamente hasta convertirse en la capa de ejecución: la fontanería programable que hace que todo el sistema sea utilizable. Existen varias L3 que cumplen ahora con esta función, y Orbs es el ejemplo perfecto. Su último producto, dSLTP (Decentralized Stop-Loss and Take-Profit), está pensado para el trading en DEX —pero en lugar de obligar a los usuarios a ir a Layer 3, lleva esta función estilo CEX a los exchanges descentralizados en capas inferiores.

Este cambio encarna el papel que las L3 desempeñan cada vez más como entornos de ejecución descentralizados: nubes programables que se sitúan por encima de la cadena principal, ejecutando scripts lógicos complejos para que tu dapp favorita no tenga que hacerlo. Y Orbs no es la única Layer 3 que está jugando este juego con gran éxito.

La capa lógica

Las L3 basadas en StarkEx están impulsando lógica específica de dominio para gaming y analítica DeFi. El framework Hyperchains de zkSync permite a las aplicaciones desplegar entornos L3 aislados con reglas de ejecución personalizadas. Incluso la visión Superchain de Optimism anticipa la aparición de capas de automatización al estilo L3 como módulos opcionales sobre las OP Chains. Estas son capas de ejecución funcionales que extienden silenciosamente lo que DeFi puede hacer.

Eso no quiere decir que todas las Layer 3 estén diseñadas para servir como mayordomos de otras cadenas: algunas están pensadas para llevar a los usuarios directamente a la fuente. Xai está utilizando esta capacidad para abstraer por completo los componentes blockchain para los gamers, mientras que Degen Chain ha demostrado cómo las L3 pueden desplegarse rápidamente para servir a comunidades hiper-específicas.

Si hay un hilo conductor entre todos los proyectos mencionados aquí, aparte de operar en Layer 3, es que el beneficio real que aportan no es más espacio en bloques, sino más inteligencia. Desplazan el cómputo a una capa de automatización programable que interactúa con los protocolos del mismo modo que la dirección asistida lo hace con un coche, logrando así una experiencia de usuario más fluida.

Orbs añade mayor funcionalidad a DEXs consolidados a través de protocolos plug-and-play como dSLTP y dTWAP; las L3 de StarkEx y zkSync Hyperchains hacen que las dapps sean más ligeras y rápidas; y Xai ofrece gaming web3 envuelto en un paquete web2, manteniendo la conectividad con Arbitrum para que los usuarios crypto puedan incorporarse.

DeFi sin inconvenientes

En cuanto a cómo todo esto mejora DeFi, en esencia se trata de reducir la descentralización en dominios no críticos a favor de una mayor velocidad y eficiencia —sin ceder ni un ápice donde realmente importa, como la liquidación en las Layer 1—. Es importante que la wallet donde residen tus fondos esté en una blockchain altamente descentralizada, optimizada para la seguridad y una fuerte finalidad de las transacciones. No importa especialmente si los smart contracts que controlan las órdenes límite que estás configurando están desplegados en Layer 3.

La consecuencia de todo esto es que los protocolos ya no están limitados por las capacidades de la cadena donde se despliegan. Ahora pueden modelar su propio entorno de ejecución, haciéndolo tan flexible o especializado como necesiten sin sacrificar la composabilidad. A medida que más dapps se conectan a frameworks de ejecución como Orbs y la tecnología modular rollup se vuelve más personalizable, la próxima fase de DeFi no será la búsqueda de la mejor cadena. En su lugar, se parecerá más a una carrera para construir el mejor entorno de ejecución alrededor de las cadenas existentes.

Internet ha hecho en gran medida obsoleta la lotería del lugar de nacimiento, donde tus oportunidades laborales estaban limitadas al radio de 80 kilómetros donde naciste. Las Layer 3 están haciendo ahora lo mismo para DeFi. Ya no importa dónde esté desplegada tu dapp: lo único relevante es que esté conectada a los protocolos que puedan potenciarla para ofrecer toda la liquidez, datos y otra infraestructura que necesita. Lo que ocurre en Layer 3 ya no se queda en Layer 3: ahora impregna toda la pila blockchain, haciendo que DeFi sea tan grande como se merece.