Últimamente he visto que Buffett ha reducido considerablemente su exposición a acciones estadounidenses y está acumulando efectivo, lo que ha hecho que mucha gente en el mercado prediga un mal futuro para la bolsa de EE. UU. Pero creo que esta jugada de Buffett puede ser aún más inteligente de lo que parece a simple vista.
Veámoslo desde otro enfoque:
Si la IA resulta ser una burbuja, y la bolsa se desploma, Buffett tendrá mucho efectivo en mano para comprar gangas en el momento adecuado.
Si la IA no es una burbuja, entonces sí que viviremos un “gran reinicio”. Piénsalo: cuando la IA madure de verdad, la mayoría de las empresas del mundo serán eliminadas, y puede que al final menos del 1% de los gigantes de la IA monopolicen el 99% de los beneficios globales. Esto no es ciencia ficción. Ya hay estudios de efectos especiales y agencias de publicidad en EE. UU. que han quebrado por culpa de la IA. Siguiendo esta tendencia, las acciones tradicionales de valor acabarán viéndose afectadas tarde o temprano. Buffett vendiendo en máximos ahora es un ejemplo de manual de cómo asegurar ganancias.
La realidad probablemente sea más compleja: en torno al 70% de las regiones podrían experimentar el primer escenario y un 30% el segundo extremo. Pero ocurra lo que ocurra, la decisión de Buffett está bien fundamentada.
A veces, la jugada más inteligente no es apostar por una dirección, sino asegurarse de no perder sea cual sea el rumbo.
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Últimamente he visto que Buffett ha reducido considerablemente su exposición a acciones estadounidenses y está acumulando efectivo, lo que ha hecho que mucha gente en el mercado prediga un mal futuro para la bolsa de EE. UU. Pero creo que esta jugada de Buffett puede ser aún más inteligente de lo que parece a simple vista.
Veámoslo desde otro enfoque:
Si la IA resulta ser una burbuja, y la bolsa se desploma, Buffett tendrá mucho efectivo en mano para comprar gangas en el momento adecuado.
Si la IA no es una burbuja, entonces sí que viviremos un “gran reinicio”. Piénsalo: cuando la IA madure de verdad, la mayoría de las empresas del mundo serán eliminadas, y puede que al final menos del 1% de los gigantes de la IA monopolicen el 99% de los beneficios globales. Esto no es ciencia ficción. Ya hay estudios de efectos especiales y agencias de publicidad en EE. UU. que han quebrado por culpa de la IA. Siguiendo esta tendencia, las acciones tradicionales de valor acabarán viéndose afectadas tarde o temprano. Buffett vendiendo en máximos ahora es un ejemplo de manual de cómo asegurar ganancias.
La realidad probablemente sea más compleja: en torno al 70% de las regiones podrían experimentar el primer escenario y un 30% el segundo extremo. Pero ocurra lo que ocurra, la decisión de Buffett está bien fundamentada.
A veces, la jugada más inteligente no es apostar por una dirección, sino asegurarse de no perder sea cual sea el rumbo.