Durante la noche, las bolsas estadounidenses se debilitaron y hay varias señales que merece la pena vigilar.

Primero, repasemos lo que ha ocurrido en el extranjero: los bonos del Estado japonés sufrieron una caída repentina, lo que provocó una presión vendedora que se extendió directamente al mercado de bonos estadounidense y elevó notablemente la aversión al riesgo a nivel global. A continuación, el asesor económico de la Casa Blanca, Hassett, enfrió las expectativas: afirmó que planificar un calendario de bajadas de tipos con seis meses de antelación es irresponsable y recalcó que la Reserva Federal debe tomar decisiones basadas en los datos. Estas declaraciones redujeron bruscamente las expectativas de bajadas de tipos en 2026 por parte del mercado.

Sin embargo, también hay signos de relajación: circulan rumores de que podría permitirse la exportación a China del chip H200 de Nvidia, lo que ha estabilizado a las tecnológicas. Los valores chinos cotizados en el extranjero subieron anoche, aunque devolvieron las ganancias durante la sesión asiática; el sentimiento sigue siendo volátil.

¿Y cómo vemos hoy el comportamiento del A-share? Algunas valoraciones:

Ya hemos realizado compras en los niveles bajos anteriormente, así que en estos precios actuales, perseguir subidas no es rentable: la probabilidad de éxito y la relación riesgo/beneficio no son ideales. Para la mayoría, lo más adecuado es esperar una próxima corrección.

El sector de las casas de bolsa sí tiene algunos factores negativos, pero ayer ya experimentó una subida seguida de una corrección, con lo que parte de la presión ya se ha liberado; incluso si hoy abre a la baja, la presión se alivia aún más.

En general, incluso si el A-share abre a la baja o sufre una corrección intradía, no debería ser un gran problema. Sigo considerando que cualquier ajuste es una oportunidad para posicionarse, y la tendencia a medio plazo sigue siendo alcista.