El gestor de la empresa de gestión de activos, Michael W. Green, afirmó que los hogares con ingresos anuales inferiores a 140.000 dólares viven en la pobreza. Esta afirmación se hizo viral rápidamente, pero también recibió fuertes críticas por parte de economistas. Críticos como Scott Winship y Tyler Cowen señalaron que el análisis de Green es defectuoso, ya que no tiene en cuenta que la calidad y asequibilidad de bienes, vivienda y atención sanitaria han mejorado considerablemente con el tiempo. Citaron datos que muestran que la clase media está disminuyendo debido al ascenso de ingresos hacia niveles más altos, y que la tasa de pobreza medida por el consumo también ha disminuido significativamente.