Un fren me envió una captura de pantalla, diciendo que otro amigo fue "graduado de forma forzada". No hay nada nuevo, la emoción de FOMO nos lleva, perseguimos el precio y usamos apalancamiento, una ola de vela de mecha larga, así de simple.
Este lugar en el mundo de las criptomonedas, si dices que es un amplificador, no estás equivocado. Tu pequeña codicia, durante el aumento de las velas, es evidente, siempre pensando "no te detengas, simplemente hazlo", pero el resultado a menudo se convierte en el paisaje de la cima de la montaña. Tu pequeño miedo, cuando llega la caída, escapas más rápido que nadie, liquidando a precio de suelo y entregando las fichas manchadas de sangre a otros.
En realidad, no hay tantos "errores técnicos". Cada vez que haces un pedido por un movimiento involuntario, es tu carácter el que está pagando. Al mirar los números en tu cuenta, a veces parece una montaña rusa, a veces un electrocardiograma. Detrás de una inversión total, está tu naturaleza obstinada y adicta al juego que está causando problemas. Al final, si estás atrapado, no quieres admitir tu error, te aferras a ello, pretendiendo que mientras no vendas, no estás perdiendo.
Más tarde me di cuenta de que el verdadero oponente en este mercado no es el "perro", sino uno mismo en el espejo. Cuando puedas hacer que prefieres perderte cien oportunidades que no entiendes solo para esperar esa única oportunidad que realmente puedes aprovechar, quizás ese sea el momento en que realmente hayas comprendido el arte de operar.
Ver originales
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
Un fren me envió una captura de pantalla, diciendo que otro amigo fue "graduado de forma forzada". No hay nada nuevo, la emoción de FOMO nos lleva, perseguimos el precio y usamos apalancamiento, una ola de vela de mecha larga, así de simple.
Este lugar en el mundo de las criptomonedas, si dices que es un amplificador, no estás equivocado. Tu pequeña codicia, durante el aumento de las velas, es evidente, siempre pensando "no te detengas, simplemente hazlo", pero el resultado a menudo se convierte en el paisaje de la cima de la montaña. Tu pequeño miedo, cuando llega la caída, escapas más rápido que nadie, liquidando a precio de suelo y entregando las fichas manchadas de sangre a otros.
En realidad, no hay tantos "errores técnicos". Cada vez que haces un pedido por un movimiento involuntario, es tu carácter el que está pagando. Al mirar los números en tu cuenta, a veces parece una montaña rusa, a veces un electrocardiograma. Detrás de una inversión total, está tu naturaleza obstinada y adicta al juego que está causando problemas. Al final, si estás atrapado, no quieres admitir tu error, te aferras a ello, pretendiendo que mientras no vendas, no estás perdiendo.
Más tarde me di cuenta de que el verdadero oponente en este mercado no es el "perro", sino uno mismo en el espejo. Cuando puedas hacer que prefieres perderte cien oportunidades que no entiendes solo para esperar esa única oportunidad que realmente puedes aprovechar, quizás ese sea el momento en que realmente hayas comprendido el arte de operar.