El Proceso Conoce a su cliente (KYC)

El proceso KYC se ha vuelto imprescindible en varios sectores. Finanzas, tecnología, blockchain... todos se someten a ello. Al verificar la identidad de los clientes, se reducen los riesgos. Se evitan fraudes. Simple.

Las cifras hablan por sí mismas. 2024: aproximadamente 4,5 mil millones de dólares perdidos en fraudes. ¿El fraude de identidad? Un problema importante. Por lo tanto, el KYC parece esencial.

¿De dónde viene el KYC?

Todo comenzó después del 11 de septiembre de 2001. La ley PATRIOT estadounidense. Una reacción. Los bancos de repente debían saber quiénes eran sus clientes. Realmente conocerlos.

¿Para qué sirve el KYC concretamente?

Verificar quiénes son los clientes. Evaluar los riesgos. Monitorear sus transacciones. El KYC va más allá, de hecho. Intenta entender los hábitos de los clientes. ¿Un poco intrusivo? Quizás. Pero eso limita los riesgos de lavado de dinero.

Su impacto en el mercado

El KYC ha transformado los negocios. Responsabilidad. Integridad. Palabras que ahora importan. Desde la tecnología hasta los bancos, es la base de toda relación con el cliente. Refuerza la confianza. No siempre es fácil de implementar, sin embargo.

Las novedades en materia de KYC

Lo digital lo cambia todo. El KYC también evoluciona. El eKYC gana terreno. La biometría se impone. La IA detecta fraudes. No es perfecto, pero es eficaz.

En 2025, la UE y Polonia endurecieron sus reglas. Verificación biométrica obligatoria. Controles de vitalidad. La protección de la privacidad es prioritaria, parece.

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En resumen, el KYC combate la criminalidad financiera. Lucha contra el robo de identidad. La transformación digital lo ha hecho más rápido. También más fiable. Al final, tal vez. Algunos expertos siguen siendo escépticos.