La evolución del sistema monetario y el auge de Bitcoin
Desde 2022, la correlación entre el Bitcoin y el precio del oro ha aumentado significativamente, lo que coincide con la llegada de la nueva era "post-pandemia". En esta era, el Bitcoin tiene el potencial de participar en una transformación importante del sistema monetario internacional. Esta transformación del sistema monetario internacional podría acelerar sin precedentes la profundización de las propiedades de "oro" del Bitcoin, permitiendo que su valor como moneda de reserva entre más rápidamente en la vista del público.
Al revisar la historia de la moneda y el desarrollo del sistema monetario internacional, los metales preciosos, especialmente el oro, debido a su escasez, divisibilidad y facilidad de almacenamiento, se convirtieron en los precursores del consenso humano: la moneda. El sistema monetario del mundo moderno ha pasado por múltiples transformaciones. En 1819, el Reino Unido estableció el patrón oro. Después de las dos guerras mundiales, se estableció el sistema de Bretton Woods, administrado por el Fondo Monetario Internacional, lo que hizo que el patrón oro fuera más normativo.
Sin embargo, el sistema de Bretton Woods enfrenta el "dilema de Triffin": el dólar está vinculado al oro, pero también debe convertirse en la moneda mundial, lo que genera una contradicción entre la oferta monetaria y la estabilidad del valor de la moneda. En 1976, el sistema de Bretton Woods colapsó y se estableció el sistema de Jamaica, donde el dólar se desacopló del oro y, gracias a su "hegemonía", se convirtió en la moneda de referencia mundial.
La hegemonía del dólar, aunque ha impulsado el comercio internacional y la economía global, también presenta problemas inherentes. Estados Unidos no puede mantenerse fuerte para siempre, y la práctica de la hegemonía del dólar de cobrar un impuesto sobre la moneda al mundo es difícil de sostener. Durante la pandemia, estos problemas se intensificaron, con una expansión descontrolada de la deuda gubernamental. Además, los problemas geopolíticos también están cada vez más destacados, y la exclusión de Rusia del sistema SWIFT es un evento emblemático de la tendencia de diversificación en el ámbito monetario.
A pesar de ello, la posición del dólar como moneda internacional seguirá siendo difícil de reemplazar a corto plazo. A finales de 2023, la participación de Estados Unidos en la economía global seguirá siendo de una cuarta parte, la proporción del dólar en los pagos monetarios globales aumentará al 48% y en las reservas de divisas internacionales alcanzará el 59%. Sin embargo, la semilla del cambio ya ha sido sembrada, y el sistema de Jamaica basado en la hegemonía del dólar podría ser difícil de mantener a largo plazo bajo el nuevo panorama geopolítico y las tendencias de desarrollo tecnológico.
El futuro sistema monetario internacional podría presentar diversas formas. La "desdolarización" se ha convertido en un consenso, solo es cuestión de tiempo que la cantidad se convierta en calidad. Factores como la pandemia de COVID-19, los conflictos geopolíticos y los cambios políticos están acelerando este proceso.
El proceso de "desdolarización" podría acelerarse repentinamente en ciertas circunstancias, como la reestructuración de cadenas industriales y cambios geopolíticos. En el futuro, podría formarse un sistema de monedas de reserva múltiple predominado por el dólar, el euro y el renminbi, con la libra esterlina, el yen y los DEG como complementos. También hay opiniones que sugieren que en el futuro podría aparecer un sistema de "monedas externas" respaldado por oro y otros productos, enfatizando el valor de los recursos físicos.
En este contexto, el mercado financiero puede mostrar dos tendencias: una es que el precio del oro se eleva alejándose de la lógica de fijación de precios de las tasas de interés reales tradicionales; la otra es que el Bitcoin se desvincula de la lógica de fijación de precios de los activos de riesgo tradicionales y continúa apreciándose. Estas dos tendencias reflejan las expectativas del mercado sobre la transformación futura del sistema monetario.
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
14 me gusta
Recompensa
14
5
Republicar
Compartir
Comentar
0/400
ApeWithNoFear
· hace6h
btc es el oro digital
Ver originalesResponder0
FalseProfitProphet
· hace6h
Es importante hacer dinero, hermanos.
Ver originalesResponder0
ReverseTradingGuru
· hace6h
¿No es bueno el btc? Simplemente acumula.
Ver originalesResponder0
TrustMeBro
· hace7h
En el mundo Cripto, no se puede competir con la montaña más alta.
Bitcoin y oro bailan juntos, la gran transformación del sistema monetario global
La evolución del sistema monetario y el auge de Bitcoin
Desde 2022, la correlación entre el Bitcoin y el precio del oro ha aumentado significativamente, lo que coincide con la llegada de la nueva era "post-pandemia". En esta era, el Bitcoin tiene el potencial de participar en una transformación importante del sistema monetario internacional. Esta transformación del sistema monetario internacional podría acelerar sin precedentes la profundización de las propiedades de "oro" del Bitcoin, permitiendo que su valor como moneda de reserva entre más rápidamente en la vista del público.
Al revisar la historia de la moneda y el desarrollo del sistema monetario internacional, los metales preciosos, especialmente el oro, debido a su escasez, divisibilidad y facilidad de almacenamiento, se convirtieron en los precursores del consenso humano: la moneda. El sistema monetario del mundo moderno ha pasado por múltiples transformaciones. En 1819, el Reino Unido estableció el patrón oro. Después de las dos guerras mundiales, se estableció el sistema de Bretton Woods, administrado por el Fondo Monetario Internacional, lo que hizo que el patrón oro fuera más normativo.
Sin embargo, el sistema de Bretton Woods enfrenta el "dilema de Triffin": el dólar está vinculado al oro, pero también debe convertirse en la moneda mundial, lo que genera una contradicción entre la oferta monetaria y la estabilidad del valor de la moneda. En 1976, el sistema de Bretton Woods colapsó y se estableció el sistema de Jamaica, donde el dólar se desacopló del oro y, gracias a su "hegemonía", se convirtió en la moneda de referencia mundial.
La hegemonía del dólar, aunque ha impulsado el comercio internacional y la economía global, también presenta problemas inherentes. Estados Unidos no puede mantenerse fuerte para siempre, y la práctica de la hegemonía del dólar de cobrar un impuesto sobre la moneda al mundo es difícil de sostener. Durante la pandemia, estos problemas se intensificaron, con una expansión descontrolada de la deuda gubernamental. Además, los problemas geopolíticos también están cada vez más destacados, y la exclusión de Rusia del sistema SWIFT es un evento emblemático de la tendencia de diversificación en el ámbito monetario.
A pesar de ello, la posición del dólar como moneda internacional seguirá siendo difícil de reemplazar a corto plazo. A finales de 2023, la participación de Estados Unidos en la economía global seguirá siendo de una cuarta parte, la proporción del dólar en los pagos monetarios globales aumentará al 48% y en las reservas de divisas internacionales alcanzará el 59%. Sin embargo, la semilla del cambio ya ha sido sembrada, y el sistema de Jamaica basado en la hegemonía del dólar podría ser difícil de mantener a largo plazo bajo el nuevo panorama geopolítico y las tendencias de desarrollo tecnológico.
El futuro sistema monetario internacional podría presentar diversas formas. La "desdolarización" se ha convertido en un consenso, solo es cuestión de tiempo que la cantidad se convierta en calidad. Factores como la pandemia de COVID-19, los conflictos geopolíticos y los cambios políticos están acelerando este proceso.
El proceso de "desdolarización" podría acelerarse repentinamente en ciertas circunstancias, como la reestructuración de cadenas industriales y cambios geopolíticos. En el futuro, podría formarse un sistema de monedas de reserva múltiple predominado por el dólar, el euro y el renminbi, con la libra esterlina, el yen y los DEG como complementos. También hay opiniones que sugieren que en el futuro podría aparecer un sistema de "monedas externas" respaldado por oro y otros productos, enfatizando el valor de los recursos físicos.
En este contexto, el mercado financiero puede mostrar dos tendencias: una es que el precio del oro se eleva alejándose de la lógica de fijación de precios de las tasas de interés reales tradicionales; la otra es que el Bitcoin se desvincula de la lógica de fijación de precios de los activos de riesgo tradicionales y continúa apreciándose. Estas dos tendencias reflejan las expectativas del mercado sobre la transformación futura del sistema monetario.