Reconocimiento legal de los activos encriptados: un caso especial de robo de Bitcoin
En los últimos años, con el florecimiento de la tecnología de encriptación, las monedas como Bitcoin, Ether y Tether han ido entrando gradualmente en la vista del público. Estos activos digitales, aunque se manifiestan como código y datos, poseen en realidad las propiedades esenciales de la propiedad debido a su valor, transferibilidad y exclusividad. En China, a pesar de que las regulaciones relacionadas prohíben el uso de monedas virtuales como moneda de curso legal o la especulación, en la práctica judicial se ha reconocido ampliamente su estatus como "bienes virtuales específicos" o "propiedad basada en datos".
En el ámbito de la justicia penal, los casos relacionados con moneda virtual están en aumento, concentrándose principalmente en tipos como el fraude, el robo y el crimen cibernético. Sin embargo, los casos de robo que utilizan directamente la violencia o amenazas para obtener moneda virtual son relativamente raros. Por lo tanto, un caso de robo de Bitcoin que ocurrió en Yichun, Jiangxi en 2021 ((2022) Gan 09刑终 9号) ha llamado ampliamente la atención. Este caso, debido a su singularidad y complejidad, se ha convertido en un caso típico en la práctica judicial, proporcionando una referencia importante para la calificación y la imposición de penas en casos penales relacionados con encriptación de activos.
Resumen del caso: un plan de robo de Bitcoin fallido
En mayo de 2021, Lai, debido a pérdidas en el comercio de monedas, se enteró de que el profesor Peng poseía al menos 5 Bitcoins (cada uno valorado en aproximadamente 255,000 yuanes en ese momento), y tuvo la idea de robarlo. Reclutó cómplices a través de Internet, y un individuo, llamado X, se unió a él. Después de reunirse en Yichun, elaboraron un plan detallado para el robo, que incluía la preparación de bridas de nylon y el acuerdo sobre la distribución del botín. Sin embargo, antes de que pudieran reunir suficientes manos, la policía los arrestó basándose en pistas, lo que impidió que el plan criminal se llevara a cabo.
El tribunal de primera instancia determinó que las dos personas cometieron el delito de robo, imponiéndoles penas de tres años y un año de prisión, respectivamente. El tribunal de segunda instancia, considerando que el caso estaba solo en fase preparatoria, no había causado pérdidas reales y había dudas sobre la valoración del Bitcoin, finalmente cambió la sentencia a un año y seis meses para Lai y nueve meses para otro, reduciendo significativamente las penas.
La calificación legal del robo de Bitcoin
La controversia central del caso es: ¿el robo de Bitcoin constituye un delito de robo en el sentido del Código Penal? La sentencia del tribunal dio una respuesta afirmativa.
El delito de robo se refiere a la conducta de apoderarse de bienes públicos o privados mediante violencia, coerción, etc. Aunque Bitcoin es esencialmente una cadena de datos encriptados, debido a sus características de intercambiabilidad, transferibilidad y valor de mercado real, cumple con las características de "bienes en sentido amplio". El tribunal citó documentos de políticas relevantes y calificó a Bitcoin como "un producto virtual específico" y "propiedad de datos", considerando que debe estar protegido por la ley.
Por lo tanto, el acto de robar Bitcoin perjudica los intereses patrimoniales de otros, y no hay una diferencia esencial con el robo de efectivo o bienes en el sentido tradicional. En este caso, aunque el delito no se llevó a cabo, los actos preparatorios del acusado constituyeron un delito de robo en grado de tentativa, y el tribunal dictó un fallo en consecuencia.
Consideraciones sobre la pena en delitos relacionados con la moneda virtual
En los casos de delitos relacionados con moneda virtual, un factor clave en la determinación de la pena es cómo se establece el "valor de propiedad". En este caso, el tribunal de primera instancia tomó como referencia el precio de mercado del Bitcoin en el momento de los hechos, determinando que era "especialmente grande" y aplicando una pena más severa. Sin embargo, el tribunal de segunda instancia tiene una opinión diferente, considerando:
El caso no ha entrado en la etapa de implementación y no se han obtenido bienes de manera efectiva.
Bitcoin carece de un mercado de intercambio legal en el país, y los estándares de determinación de precios no son claros.
La condena por el delito de robo debe basarse en la cantidad realmente robada, siendo difícil definir con precisión el valor en la etapa de preparación.
El tribunal de segunda instancia enfatiza que la valoración de activos encriptados como las monedas virtuales debe seguir el principio de "compensación de pérdidas", centrándose en la pérdida real del víctima. Los principales factores de referencia incluyen: el precio de compra del víctima, el precio de la plataforma de negociación en el momento del incidente, el precio de reventa (si lo hay), etc.
El tribunal también señaló que, aunque nuestro país no reconoce el estatus de moneda del Bitcoin, no ha prohibido la posesión y transferencia de activos virtuales por parte de individuos. Por lo tanto, la posesión legal de los activos virtuales por parte de las víctimas debe estar protegida por la ley.
Finalmente, el tribunal de apelación no adoptó la circunstancia agravante de "cantidad enorme", sino que consideró de manera integral la peligrosidad, los métodos y los riesgos reales de la fase de preparación del robo, y dictó una sentencia relativamente más indulgente para los dos acusados.
Conclusión: las tendencias futuras de la protección legal de los activos encriptados
El fallo de este caso no solo proporciona orientación para los casos de robo relacionados con monedas virtuales, sino que también transmite un mensaje claro: la propiedad de las monedas virtuales ha sido ampliamente reconocida en la práctica del derecho penal en China.
Bajo el marco legal actual, aunque los activos encriptación como Bitcoin no tienen propiedades monetarias, su valor patrimonial ya ha sido reconocido. Ya sea a través de fraude, robo, control ilegal de sistemas informáticos, extorsión o robo violento, siempre que el autor implemente actos de infracción con el propósito de apropiación ilegal, será considerado un delito patrimonial.
Con el desarrollo profundo de la economía digital, los casos penales relacionados con activos encriptados serán cada vez más diversos, y las autoridades judiciales enfrentarán más nuevos casos y controversias. En el futuro, la ley necesitará aclarar aún más la propiedad legal de las monedas virtuales, los estándares de valoración del mercado y los límites entre datos y propiedad, y establecer reglas de juicio judicial más unificadas y estables. Al mismo tiempo, los profesionales también necesitarán seguir aprendiendo sobre los conocimientos de vanguardia en el campo de la encriptación para abordar mejor los problemas legales relacionados.
Es previsible que los activos encriptados obtendrán cada vez más reconocimiento y protección legal, y cualquier acto que infrinja los derechos legítimos de sus poseedores será severamente perseguido por la ley. Esta tendencia no solo refleja la adaptabilidad de la ley a las nuevas formas de propiedad, sino que también proporciona una importante garantía para la protección de los derechos de propiedad en la era de la economía digital.
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SchrodingerAirdrop
· hace4h
En este caso, el robo fue bastante profesional.
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GasFeeBeggar
· hace17h
Comercio de criptomonedas no es seguro.
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0xSoulless
· hace17h
tontos están robando tontos, realmente los tiempos han cambiado.
El robo de Bitcoin constituye un delito penal, y la práctica judicial impulsa la protección legal de los activos encriptados.
Reconocimiento legal de los activos encriptados: un caso especial de robo de Bitcoin
En los últimos años, con el florecimiento de la tecnología de encriptación, las monedas como Bitcoin, Ether y Tether han ido entrando gradualmente en la vista del público. Estos activos digitales, aunque se manifiestan como código y datos, poseen en realidad las propiedades esenciales de la propiedad debido a su valor, transferibilidad y exclusividad. En China, a pesar de que las regulaciones relacionadas prohíben el uso de monedas virtuales como moneda de curso legal o la especulación, en la práctica judicial se ha reconocido ampliamente su estatus como "bienes virtuales específicos" o "propiedad basada en datos".
En el ámbito de la justicia penal, los casos relacionados con moneda virtual están en aumento, concentrándose principalmente en tipos como el fraude, el robo y el crimen cibernético. Sin embargo, los casos de robo que utilizan directamente la violencia o amenazas para obtener moneda virtual son relativamente raros. Por lo tanto, un caso de robo de Bitcoin que ocurrió en Yichun, Jiangxi en 2021 ((2022) Gan 09刑终 9号) ha llamado ampliamente la atención. Este caso, debido a su singularidad y complejidad, se ha convertido en un caso típico en la práctica judicial, proporcionando una referencia importante para la calificación y la imposición de penas en casos penales relacionados con encriptación de activos.
Resumen del caso: un plan de robo de Bitcoin fallido
En mayo de 2021, Lai, debido a pérdidas en el comercio de monedas, se enteró de que el profesor Peng poseía al menos 5 Bitcoins (cada uno valorado en aproximadamente 255,000 yuanes en ese momento), y tuvo la idea de robarlo. Reclutó cómplices a través de Internet, y un individuo, llamado X, se unió a él. Después de reunirse en Yichun, elaboraron un plan detallado para el robo, que incluía la preparación de bridas de nylon y el acuerdo sobre la distribución del botín. Sin embargo, antes de que pudieran reunir suficientes manos, la policía los arrestó basándose en pistas, lo que impidió que el plan criminal se llevara a cabo.
El tribunal de primera instancia determinó que las dos personas cometieron el delito de robo, imponiéndoles penas de tres años y un año de prisión, respectivamente. El tribunal de segunda instancia, considerando que el caso estaba solo en fase preparatoria, no había causado pérdidas reales y había dudas sobre la valoración del Bitcoin, finalmente cambió la sentencia a un año y seis meses para Lai y nueve meses para otro, reduciendo significativamente las penas.
La calificación legal del robo de Bitcoin
La controversia central del caso es: ¿el robo de Bitcoin constituye un delito de robo en el sentido del Código Penal? La sentencia del tribunal dio una respuesta afirmativa.
El delito de robo se refiere a la conducta de apoderarse de bienes públicos o privados mediante violencia, coerción, etc. Aunque Bitcoin es esencialmente una cadena de datos encriptados, debido a sus características de intercambiabilidad, transferibilidad y valor de mercado real, cumple con las características de "bienes en sentido amplio". El tribunal citó documentos de políticas relevantes y calificó a Bitcoin como "un producto virtual específico" y "propiedad de datos", considerando que debe estar protegido por la ley.
Por lo tanto, el acto de robar Bitcoin perjudica los intereses patrimoniales de otros, y no hay una diferencia esencial con el robo de efectivo o bienes en el sentido tradicional. En este caso, aunque el delito no se llevó a cabo, los actos preparatorios del acusado constituyeron un delito de robo en grado de tentativa, y el tribunal dictó un fallo en consecuencia.
Consideraciones sobre la pena en delitos relacionados con la moneda virtual
En los casos de delitos relacionados con moneda virtual, un factor clave en la determinación de la pena es cómo se establece el "valor de propiedad". En este caso, el tribunal de primera instancia tomó como referencia el precio de mercado del Bitcoin en el momento de los hechos, determinando que era "especialmente grande" y aplicando una pena más severa. Sin embargo, el tribunal de segunda instancia tiene una opinión diferente, considerando:
El tribunal de segunda instancia enfatiza que la valoración de activos encriptados como las monedas virtuales debe seguir el principio de "compensación de pérdidas", centrándose en la pérdida real del víctima. Los principales factores de referencia incluyen: el precio de compra del víctima, el precio de la plataforma de negociación en el momento del incidente, el precio de reventa (si lo hay), etc.
El tribunal también señaló que, aunque nuestro país no reconoce el estatus de moneda del Bitcoin, no ha prohibido la posesión y transferencia de activos virtuales por parte de individuos. Por lo tanto, la posesión legal de los activos virtuales por parte de las víctimas debe estar protegida por la ley.
Finalmente, el tribunal de apelación no adoptó la circunstancia agravante de "cantidad enorme", sino que consideró de manera integral la peligrosidad, los métodos y los riesgos reales de la fase de preparación del robo, y dictó una sentencia relativamente más indulgente para los dos acusados.
Conclusión: las tendencias futuras de la protección legal de los activos encriptados
El fallo de este caso no solo proporciona orientación para los casos de robo relacionados con monedas virtuales, sino que también transmite un mensaje claro: la propiedad de las monedas virtuales ha sido ampliamente reconocida en la práctica del derecho penal en China.
Bajo el marco legal actual, aunque los activos encriptación como Bitcoin no tienen propiedades monetarias, su valor patrimonial ya ha sido reconocido. Ya sea a través de fraude, robo, control ilegal de sistemas informáticos, extorsión o robo violento, siempre que el autor implemente actos de infracción con el propósito de apropiación ilegal, será considerado un delito patrimonial.
Con el desarrollo profundo de la economía digital, los casos penales relacionados con activos encriptados serán cada vez más diversos, y las autoridades judiciales enfrentarán más nuevos casos y controversias. En el futuro, la ley necesitará aclarar aún más la propiedad legal de las monedas virtuales, los estándares de valoración del mercado y los límites entre datos y propiedad, y establecer reglas de juicio judicial más unificadas y estables. Al mismo tiempo, los profesionales también necesitarán seguir aprendiendo sobre los conocimientos de vanguardia en el campo de la encriptación para abordar mejor los problemas legales relacionados.
Es previsible que los activos encriptados obtendrán cada vez más reconocimiento y protección legal, y cualquier acto que infrinja los derechos legítimos de sus poseedores será severamente perseguido por la ley. Esta tendencia no solo refleja la adaptabilidad de la ley a las nuevas formas de propiedad, sino que también proporciona una importante garantía para la protección de los derechos de propiedad en la era de la economía digital.