

La afirmación de Arthur Hayes de que la altseason nunca terminó supone un cambio de paradigma en la forma de abordar la estrategia de trading en altcoins. Tradicionalmente, se considera que la altseason es un periodo claramente delimitado (normalmente después del pico de dominio de Bitcoin), en el que el mercado de altcoins experimenta subidas sincronizadas. Hayes, sin embargo, desafía esta visión al sostener que la altseason no es un evento aislado con fechas de inicio y fin, sino un proceso continuo en el que las oportunidades aparecen y desaparecen según la clase de activo. Esta perspectiva tiene implicaciones profundas para la estructuración de carteras y el timing de entradas y salidas por parte de los traders.
Los indicadores habituales de altseason en 2024 recomiendan esperar señales técnicas concretas, como un descenso del dominio de Bitcoin bajo determinados umbrales o una alineación perfecta de factores macroeconómicos. Sin embargo, el análisis de Hayes demuestra que quienes operan bajo estos supuestos suelen perderse los movimientos selectivos que ya están en marcha en altcoins individuales. La percepción de un periodo de altseason inactivo se debe a la expectativa de repetir patrones de ciclos pasados, donde grupos enteros de activos subían a la vez. En la estructura actual, sin embargo, el mercado premia a los traders que comprenden la altseason como una dinámica de rotación: el capital fluye entre diferentes activos, pools de liquidez y narrativas de inversión en distintos momentos. Quienes esperan una subida generalizada de altcoins, similar a patrones históricos, suelen entrar cuando casi toda la rentabilidad ya ha sido capturada por los primeros en detectar los cambios en los flujos de capital.
Comprender la diferencia entre el timing mítico de la altseason y la mecánica real del mercado transforma la gestión del riesgo y la identificación de oportunidades. En vez de temporizar entradas según precedentes históricos o esperar señales universales de confirmación, los traders de éxito aplican métodos sistemáticos para detectar en tiempo real hacia dónde fluye el capital. Esto exige monitorizar continuamente el rendimiento de altcoins concretas, métricas de liquidez e indicadores de fortaleza relativa, en lugar de depender del consenso general del mercado. El modelo de Hayes sostiene que el coste de oportunidad de esperar una confirmación "oficial" de altseason supera ampliamente los riesgos de identificar y operar oportunidades selectivas conforme surgen.
El dominio de Bitcoin es probablemente el indicador más citado en el debate altseason versus dominio de Bitcoin, aunque los traders suelen malinterpretar lo que realmente indica sobre la asignación de capital. El dominio de Bitcoin mide la capitalización de mercado de Bitcoin frente al conjunto del mercado cripto, y según la doctrina clásica, una caída del dominio supone que el dinero va hacia las altcoins. Sin embargo, esto simplifica en exceso la realidad de los flujos de capital en cripto. Un colapso del dominio de Bitcoin no activa automáticamente subidas sincronizadas de altcoins, sino que refleja periodos en los que el capital se mueve hacia narrativas concretas de altcoins, protocolos DeFi emergentes o soluciones layer-two en auge.
El punto clave en el análisis de Hayes sobre la altseason está en reconocer que los movimientos del dominio de Bitcoin suelen ir por detrás de la reasignación real del capital. Cuando el dominio de Bitcoin cae de forma visible, los traders sofisticados ya han tomado posiciones en aquellas altcoins que más se beneficiarán de esa rotación. Este desfase temporal genera una paradoja: la señal más evidente (el descenso del dominio de Bitcoin) es en realidad un indicador rezagado. Los traders que esperan a que el dominio de Bitcoin caiga por debajo de los soportes históricos del 38-40 % suelen entrar tras la fase más rentable del ciclo. En vez de ver el colapso del dominio como señal de entrada, resulta más útil como confirmación de que la rotación está en marcha, lo que lleva a evaluar qué altcoins han captado ya la mayor parte del capital desplazado.
| Métrica | Interpretación de la señal | Realidad temporal | Acción del trader |
|---|---|---|---|
| Dominio BTC >50 % | Posible inicio de altseason | Ya 2-4 semanas de rotación | Investigar narrativas emergentes |
| Dominio BTC 45-50 % | Reconocimiento temprano de altseason | Fase intermedia para los ganadores | Posicionamiento selectivo |
| Dominio BTC <40 % | Altseason confirmada | Ganadores ya definidos | Relación riesgo/beneficio baja |
| Dominio BTC cayendo rápido | Reasignación masiva | Pico de volatilidad y sentimiento | Precaución |
Este desfase explica por qué Hayes insiste en que los traders pierden oportunidades por esperar señales que todo el mundo puede ver. Los que capturan el mayor valor durante las rotaciones de altseason operan cuando las métricas de dominio de Bitcoin parecen estables o solo ligeramente a la baja, etapas en las que la mayoría del mercado sigue siendo escéptica respecto a un rally amplio de altcoins. Estos primeros identifican las narrativas emergentes a través de señales como cambios en la actividad de red, compromisos de desarrolladores, interés institucional en soluciones layer-two concretas o variaciones en la adopción de protocolos DeFi. Cuando el dominio de Bitcoin finalmente cae de forma clara, los principales beneficiados por esa rotación de capital ya han registrado subidas significativas. Interpretar el dominio de Bitcoin de esta manera lo convierte en métrica de confirmación (no de entrada), útil para valorar el punto del ciclo de altseason y ajustar el tamaño de posición en consecuencia.
En el mercado cripto actual, las subidas de altcoins dependen esencialmente de dónde se concentra la liquidez, generando grupos claros de ganadores y perdedores imposibles de anticipar solo con métricas tradicionales de valoración. El planteamiento de Hayes sobre cómo aprovechar la altseason parte de que los flujos de capital siguen patrones concretos: buscan activos con nuevos casos de uso, mejores condiciones de liquidez y narrativas que obtienen atención institucional o minorista. Las altcoins individuales no suben porque su tecnología mejore de un día para otro, sino porque el capital que sale de Bitcoin o de stablecoins busca oportunidades con mayor velocidad en ese momento.
Esta lógica basada en la liquidez explica por qué los índices generales de altcoins se comportan de forma distinta a las apuestas concentradas en tokens concretos que captan flujos direccionales. Durante la altseason, el capital raramente se distribuye de forma igualitaria; se concentra en nichos específicos. Los tokens DeFi suben cuando los protocolos presentan innovaciones o mejoras en gobernanza. Los tokens layer-two se disparan cuando las soluciones de escalado reducen costes frente a la red principal. Las meme coins se revalorizan cuando hay coordinación social e interés minorista. Este fenómeno de concentración implica que quienes esperan una “altseason” homogénea pierden la ventaja de identificar qué grupos captarán más capital en cada fase del ciclo.
La clave para aprovechar la altseason está en seguir los flujos reales de capital, no esperar movimientos sincronizados. Plataformas como Gate ofrecen herramientas avanzadas para monitorizar liquidez, dinámica de order books y patrones de volumen en las distintas categorías de altcoins. Los traders que revisan sistemáticamente qué categorías han tenido picos de volumen, qué protocolos aumentan en usuarios y qué tokens superan resistencias clave se posicionan antes de que el mercado lo reconozca. Por eso Hayes afirma que la altseason nunca terminó: las oportunidades surgen continuamente a medida que el capital rota entre activos. Los traders que pierden estas oportunidades son los que esperan confirmaciones universales en vez de identificar de forma activa dónde fluye el capital y posicionarse en consecuencia. La diferencia entre ganadores y perdedores en estas rotaciones radica en operar de forma reactiva (con indicadores rezagados) o activa (con observación de liquidez en tiempo real).
Los modelos tradicionales de altseason suelen citar la “regla del 75 %” (la altseason empieza cuando las altcoins suman el 75 % del valor total de mercado), pero esta métrica no es útil para el trading porque mide un resultado, no anticipa movimientos. Cuando las altcoins alcanzan ese 75 %, la mayor parte de la revalorización ya se ha producido en las que lideraron el movimiento. Los traders de éxito que aplican estrategias sobre altseason van más allá de este umbral y buscan ganadores en tiempo real mediante análisis detallados de actividad on-chain, métricas de protocolo y señales de microestructura de mercado.
Identificar ganadores de altseason exige vigilar varias señales interconectadas de forma simultánea. Las métricas de actividad de red (direcciones únicas, volúmenes de transacciones, contribuciones de desarrolladores) indican qué protocolos crecen por uso genuino, no solo por especulación. Las tasas de despliegue de smart contracts muestran si hay desarrollo real en layer-two o blockchains alternativas. Los patrones de uso de gas reflejan la concentración de actividad económica, más allá de la atención mediática. Las tasas de financiación en derivados revelan si los traders apuestan por continuaciones o prevén retrocesos. En conjunto, estas métricas ofrecen una visión clara de qué altcoins combinan crecimiento de uso, avance técnico y buen posicionamiento para seguir captando valor en la rotación de capital de la altseason.
Aplicar este análisis exige filtrar sistemáticamente cientos de altcoins y detectar las que cumplen varios criterios simultáneamente. Protocolos que aumentan actividad de red, reciben más contribuciones de desarrolladores y presentan condiciones sanas en tasas de financiación sin apalancamiento excesivo son candidatos sólidos. Por el contrario, altcoins que suben sin mayor actividad on-chain suelen ser trampas especulativas: movimientos temporales sin base fundamental. Diferenciar entre subidas especulativas y rallies impulsados por liquidez y uso genuino marca la frontera entre traders que capturan grandes beneficios y quienes sufren bruscos retrocesos. Según Hayes, la información para identificar estos ganadores en tiempo real siempre ha estado disponible para quienes miran más allá del precio, lo que explica por qué algunos operadores superan sistemáticamente al mercado en ciclos de altseason, mientras otros pierden las oportunidades que señala Hayes. Los ganadores no son quienes mejor temporizan ni quienes tienen información privilegiada, sino quienes aplican un marco disciplinado que evalúa hacia dónde fluye el capital según métricas fundamentales de protocolo, y no solo según el sentimiento.







