A medida que la adopción de las stablecoins se acelera a nivel mundial, el potencial de crecimiento del ecosistema de Polygon se ha convertido en el centro de atención del mercado. Sin embargo, aunque la expansión de la infraestructura de stablecoins aporta más escenarios de transacción a la red, el token nativo de Polygon, MATIC, sigue enfrentándose a la doble presión de un bajo volumen de negociación y una competencia cada vez mayor, con su precio oscilando en un rango de soporte clave.
Los analistas del sector señalan que la tasa de adopción de stablecoins en bancos, plataformas fintech y ecosistemas empresariales está aumentando rápidamente, y que Polygon ya goza de una ventaja en esta tendencia gracias a sus bajas comisiones, alta capacidad de procesamiento y una amplia integración con redes de pago. Aishwary Gupta, responsable global de pagos y activos físicos de Polygon, predice que para 2030 podrían emitirse más de 100.000 tipos de stablecoins en todo el mundo, abarcando bancos, empresas, estados soberanos y redes comerciales. Las stablecoins se convertirán en una herramienta clave para los pagos de circuito cerrado empresariales, y los bancos también podrían emitir tokens de depósitos on-chain para mantener los fondos en su propio balance.